La cocina ha sido desde siempre la piedra angular en cualquier hogar y como tal, se ha adaptado con el paso del tiempo a nuestro moderno estilo de vida contemporáneo. Como todos sabemos las cocinas de antaño eran muy espaciosas y hoy en día, las nuevas construcciones por lo general de tamaño reducido, hacen que esta estancia quede en un segundo plano y se tenga que sacrificar un espacio tan necesario como el de la cocina.
Por ello ahora se buscan soluciones a este inconveniente ya que, aunque los tiempos cambien, nuestras buenas costumbres de hacer vida en la cocina siguen estando a la orden del día. Las cocinas abiertas al salón o cocina americana son la solución ideal, aunque no sea lo más tradicional para nosotros. Así cada persona puede desarrollar su función sin perder el contacto visual con el resto de miembros disfrutando de tenerlo todo en un mismo espacio. El momento de preparar la cena deja de ser un trabajo solitario para compartirlo con quien se encuentra en el salón. El contacto visual y la unión nos permite conversar y hacer vida común sin agobios y con total comodidad. A continuación explicamos algunas de las opciones para distribuir cocinas con concepto abierto.
COCINA ABIERTA CON BARRA
Se trata de la solución más común, se emplea en estancias de tamaño intermedio, ni muy grandes ni muy pequeñas. Igual que sucede con las islas, la barra hace la función de separador, limita visualmente el espacio de la cocina y amplía la zona de trabajo. Se trata de una solución ideal para colocar unos taburetes y crear un espacio perfecto para desayunar, tomar algún picoteo previo a la cena o conversar con la persona que está cocinando.
COCINAS PEQUEÑAS
Normalmente, para distribuir una cocina abierta en un espacio de reducidas dimensiones, ésta se limita a ocupar una única pared. Se trata de conseguir que el mobiliario de cocina quede perfectamente integradocon el resto de decoración del salón, es importante combinar bien los colores y conseguir que la cocina pase desapercibida. Mejor elige una cocina sin tiradores, aportará ligereza visual a la composición. Presta especial atención al orden, ayudarás crear esa sensación de continuidad que buscas.
La perfecta solución para integrar de manera rotunda la cocina dentro del salón. La isla es un elemento transitorio que permite ser usada tanto por la cocina como por el salón. Perfecto para estancias amplias, con suficiente espacio para distribuir la isla cómodamente. Lo mejor es que esté separada al menos un metro de los diferentes elementos que tenga a su alrededor para dejar un paso cómodo y crear fluidez.
COCINAS SEMI-ABIERTAS
Se trata de cocinas abiertas al salón pero que pueden independizarse de éste con unas simples cortinas o una puerta corredera. Es una opción muy cómoda y limpia ya que permite separar los dos ambientes en que se divide la cocina: por un lado la zona de trabajo, cocción y fregadero y por otro la zona de comedor y de almacenaje. De este modo, la cocina queda abierta al resto de la vivienda pero puede integrarse o independizarse por completo según la ocasión, esto nos dará muchas ventajas a la hora de hacer el día a día.
COCINA OCULTA
Si te molesta ver los trastos de la cocina o que cuando lleguen invitados se quede todo a la vista, esta es tu solución ideal. Se trata de cocinas, normalmente que ocupan sólo una pared, en las que con un sistema de puertas, sean abatibles o correderas, puedes ocultar toda la cocina y que ni siquiera se sepa qué hay detrás. Esta opción permite tenerlo todo siempre en perfecto orden y dejar la molesta tarea de recoger la cocina para otro momento sin preocupaciones.
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